El contrato de arrendamiento es un pilar fundamental en las relaciones inmobiliarias, ya sea para vivienda o comercio; comprender sus elementos esenciales y las protecciones legales disponibles es crucial para ambas partes: arrendador y arrendatario. 

En este artículo, exploraremos en detalle qué es un contrato de arrendamiento y cómo puedes salvaguardar sus derechos.

¿Qué es un Contrato de Arrendamiento?

Es un acuerdo legal entre dos partes de tipo oneroso y bilateral, suscrito entre el arrendador (propietario o administrador) y el arrendatario (inquilino), donde el arrendador cede el uso de un bien inmueble a cambio de un pago (canon de arrendamiento) regularmente mensual.

El contrato de arrendamiento debe contener como mínimo los siguientes elementos: 

  • Identificación de las partes: Nombre completo, tipo y número de identificación y sus datos de contacto (teléfono y correo electrónico).
  • Descripción del inmueble: Dirección, barrio, ciudad; si es en una unidad residencial o es un local comercial, el número al que corresponde.
  • Uso del inmueble: Si es vivienda o comercial (Describir la actividad a desarrollar)
  • Canon de arrendamiento: Valor, forma y lugar de pago.
  • Duración del contrato.
  • Obligaciones y derechos de cada parte.

Ahora bien, cada parte del contrato tiene derechos y obligaciones entre sí, algunos de ellos son: Uso pacífico del inmueble, entregar y recibir el inmueble en condiciones adecuada, pago puntual del canon, realizar las reparaciones necesarias y cuidar el inmueble.

Un contrato claro y detallado es una forma de prevenir conflictos; sin embargo, la mejor opción para proteger tu patrimonio como arrendatario es contar con el seguro de arrendamiento que es una herramienta valiosa para mitigar los riesgos y salvaguardar los intereses de propietarios e inquilinos.

Con este seguro, como arrendatario, tendrás la seguridad de contar con el pago del canon de arrendamiento, cuota de administración y servicios públicos.

¿Tienes alguna duda sobre tu contrato de arrendamiento? 

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